Una de las consultas que me hacen a menudo es sobre la carrera que he estudiado. En mi caso, siempre respondo lo mismo: “comunicación con un poco de audiovisuales”. Y esto, se debe a que durante el grado universitario, hemos dado tantas ramas que no me atrevería a englobarlas únicamente en el terreno audiovisual.
Así que ¡sí!, podríamos decir que los de mi rama, somos algo así como una figura multidisciplinar dedicada a crear interacción entre contenidos y usuarios, sea cual fuere el soporte de comunicación.
Y en cuanto a la comunicación… ¡Cuánto queda por aprender!
EL TRABAJO POCO VALORADO
No hace mucho tiempo, hablaba con una compañera y amiga de este mismo tema. Debatimos sobre el escaso valor laboral que se le da a nuestro trabajo, porque esto, no solo es tener una idea. Se trata de investigarla, ejecutarla, ponerla en práctica y que funcione.
Además de todo eso, no olvidemos que cada plataforma (muchas de ellas), tienen sus propios códigos de acción en los que te indican cómo usar su marca, eso mismo ocurre con los derechos de autor.
Y sí, yo también he escuchado eso de: “es muy caro por un vídeo que hago yo”. Bien, ¡hazlo!, no seré yo quien te diga que no. Es más, te apoyaré y hasta lo compartiré.
Pero no me pidas únicamente que te saque del problema cuando el actor o la actriz que has utilizado para promocionar tu proyecto, libro e historia, se entere y se enfade porque piensa que no representa aquello que tú plasmas en lo que has lanzado. Créeme, ¡eso sí que vale dinero!